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7 Señales de Agotamiento Mental y Qué Deberías Hacer para Sentirte Mejor

Vivimos rodeadxs de listas de tareas, notificaciones, móviles y scroll infinito; y en medio de todo ese ruido, cada vez hay más personas sienten que ya no pueden más, que no es solo cansancio físico sino agotamiento mental.

De ese que empieza a emborronarlo todo: tu energía, tu creatividad, tus ganas de hacer cosas y tu relación contigo mismx. Hoy queremos hablar sobre cómo reconocerlo (no siempre es fácil) y qué puedes hacer una vez que estás ahí ❤️

¿Qué es el agotamiento mental?

El agotamiento mental es un estado de saturación, tanto emocional como cognitiva.

Generalmente llega después de un periodo en el que has exprimido tu productividad al máximo. Puede ser un periodo en el que has estado hasta arriba de trabajo, te has exigido más o has intentando ser superwoman o superman intentando llegar a todo. ¿Resuena contigo?

super woman y agotamiento mental

Sin embargo, vivir en ese constante modo de hacer hacer hacer y de supervivencia, no es sostenible a largo plazo (y al final el cuerpo acaba petando 😔)

Pero, ¿cómo puedes reconocerlo una vez llega? ¿cómo sabes si simplemente es que estás cansadx o que ya no puedes más? A eso vamos 👇🏻

7 síntomas de agotamiento mental y físico 🧠

1. Fatiga constante, incluso después de dormir muchas horas

Si te levantas con cansancio cada mañana a pesar de haber dormido suficientes horas, puedes estar en esa fase de burnout o agotamiento total.

La sensación es muy parecida al cansancio físico, el problema es que por mucho que duermas. te pases el día sin hacer nada, sigues cansadx.

2. Falta de motivación con la vida

Cuando te preguntan: ¿qué necesitas? o ¿qué te ayudaría a hacerte sentir mejor? Seguramente no sepas cómo responder.

Es la sensación de no tener ganas de hacer nada, o de querer hacerlo todo pero no sacar las fuerzas o las ganas. La sensación de querer posponer todas las tareas o acabar haciendo las cosas simplemente por obligación.

3. Sensación de “niebla mental”

Durante el día te cuesta concentrarte o tomar decisiones. Te cuesta centrarte en hacer una sola cosa durante un largo periodo de tiempo o te pillas mirando el móvil a menudo entre una tarea y otra.

Pasas de una cosa a otra rápidamente intentando ser más productivx, pero no consigues centrarte realmente.

4. Irritabilidad o sensibilidad emocional

Te enfadas a menudo por pequeñas cosas o haces un mundo de algo que en realidad sabes que no tiene tanta importancia. Generalmente, tiendes a cabrearte con quien tienes más cerca ya que seguramente es con quien de verdad puedas sacar lo que sientes a la luz.

También puedes estar sufriendo ansiedad o estrés frecuente y que eso esté añadiendo más carga emocional a la situación. En este artículo puedes leer más sobre la ansiedad y cómo ayudar a alguien que la padece.

5. Dolores de cabeza o tensión a nivel muscular

Tu cuerpo habla, y muchas veces, antes que la mente. Cuando te cuesta entender lo que estás sintiendo y sigues en “piloto automático”, al final tu cuerpo acaba por mandarte señales físicas de que algo no va bien.

Algunas de estas señales físicas además de la falta de energía pueden ser: migrañas, contracturas o nudos en el estómago.

6. Cambios en el apetito o en tu relación con la comida

Aunque depende de la persona, puedes experimentar más ansiedad por la comida o todo lo contrario (se te cierra el estómago). La comida es un refugio emocional muy fuerte y por eso, tendemos a regularnos con ella cuando nos sentimos mal.

Si llevas varios días regulándote de esta forma, puede que sea una señal de ese agotamiento mental.

7. Sentimiento de desconexión o de vivir en piloto automático

Sientes que vas por la vida sin ser consciente de ella. Haces lo que “toca”, pero sin prestar atención de verdad. Algunas preguntas que pueden ayudarte a entender este punto son:

  • 🍃 ¿Cuándo fue la última vez que diste un paseo sin mirar el móvil?
  • ☕️ ¿Cuándo fue la última vez que te sentaste en casa o en la oficina y te tomaste un café sin hacer algo al mismo tiempo?
  • 🧘🏻‍♀️ ¿Cuándo fue la última vez que fuiste de un sitio a otro sin prisas?

Causas más frecuentes del agotamiento mental

Antes de pasar a la parte de qué puedes hacer para sentirte mejor, es importante que entiendas de dónde ha venido ese agotamiento mental.

Si entiendes de dónde viene, podrás prevenirlo en el futuro. Esto es esencial porque por mucho que mejores, si vuelves a caer en los mismos patrones y comportamientos, acabarás en este bucle otra vez (y no queremos eso ❤️)

El agotamiento mental y físico generalmente viene de una combinación de varios factores:

  • ⚡️ Carga mental constante: ya sea situaciones familiares que te tienen preocupadx, momentos de estrés en el trabajo o mucha carga de tareas, preocupación por una situación externa, etc.
  • ⚡️ Exceso de estimulación: ya sabemos que ver pantallas o estar con el móvil todo el día no es bueno. No sólo porque genera una desconexión del mundo real, también porque te sobreestimula y te hace creer que lo de fuera es mucho mejor de lo que tienes (afectando también a tu autoestima y cómo te sientes)
  • ⚡️ Falta de espacios de descanso real: al ir en piloto automático, quizás has pospuesto los momentos de descanso tan necesarios. Puede que no hayas dormido suficiente, que hayas trabajado los fines de semana o que hayas estado conectadx todo el día a las redes.
  • ⚡️ Perfeccionismo y autoexigencia crónica: ser perfeccionista es un síntoma muy común en casos de agotamiento mental ya que esa autoexigencia te lleva a querer hacer más cosas y no parar (entendiendo esto como productividad y no como perfeccionismo extremo)
  • ⚡️ Ausencia de límites sanos: al no poner límites (tanto externos como internos), este bucle se repite hasta que acabas física y mentalmente, agotadx.

Qué puedes hacer para empezar a sentirte mejor

Cuando estás en ese bucle puedes creer que tomándote un día de descanso o parando un poco se va a solucionar, pero en realidad tiene que haber un cambio, no sólo en ti, sino en tu forma de hacer y ver las cosas.

  1. 💛 Descansa, pero de verdad: si puedes tomarte unos días de vacaciones mejor que mejor, pero si no, intenta bajar el ritmo y no hacer absolutamente nada. Los primeros días quizás necesites quedarte en la cama toda la tarde o dar pequeños paseos y eso está bien. Necesitas bajar revoluciones.
  2. 💛 Desconecta (móviles, redes, pantallas): dentro de lo posible, tómate unos días de descanso y desconexión del móvil y las redes. Si es mucho para empezar, puedes probar a hacer un día off de móvil (quizás el fin de semana) y avisarlo previamente a amigos y familiares.
  3. 💛 Sal al aire libre: hay pocas cosas que nos ayuden más a conectar con el presente que la naturaleza. Sal a dar paseos o caminar por tu ciudad. Si puedes, escápate a un sitio que te inspire paz y desconecta de todo.
  4. 💛 Escribe cómo te sientes: es muy dificil volver a encontrarse cuando se está perdido si no sabes lo que sientes. Escribir y reflexionar puede ayudarte mucho a entender qué necesitas de verdad. Puedes probar con estas preguntas:
    • 💭 ¿Qué va bien?
    • 💭 ¿Qué podría ir mejor?
    • 💭 De la lista anterior, ¿qué puedes cambiar TÚ mismx?
    • 💭 ¿Qué te hace conectar contigo?
    • 💭 ¿Qué dos pasos pequeños puedes hacer estas semanas para sentirte mejor?
  5. 💛 Ves a terapia: por mucho que queramos resolver todo solos, hay veces que simplemente no se puede. Ir a terapia puede ayudarte a encontrar la verdadera causa de todo esto, a colocar lo que sientes y a encontrar estrategias no sólo para salir de ahí, sino para evitar volver a ese punto en un futuro. Si lo necesitas, estaremos encantadas de ayudarte.
  6. 💛 Reconecta con lo que te gusta hacer: escribe o reflexiona sobre cosas que disfrutabas haciendo y que ya no haces o incluso nuevos hobbies que siempre te han interesado pero que nunca has llegado a probar. Es el momento de intentar retomar estas actividades que te anclan y te hacen sentir bien.

En resumen

El agotamiento mental se sana con presencia, autoescucha y paciencia.

Si te identificas con varias de las señales que indicamos arriba sobre el agotamiento mental, empieza por desconectar y descansar. Cuando te sientas mejor, incorpora el journalling o escribe cómo te sientes y sal al aire libre, date tiempo para sanar.

Y si necesitas hablar con alguien, sólo tienes que escribirnos ❤️

 

Distimia: Cuando la tristeza se convierte en rutina

¿Alguna vez has sentido que el desánimo y el cansancio te acompaña durante todo el día, como si no pudieras salir de esa sensación? Puede que no se trate de un bajón pasajero, ni un mal día de esos en los que todo parece salir mal. Es más bien, una sensación continua de apatía, que se instala en tu día a día y se vuelve parte de tu rutina. Si esto te suena familiar, podrías estar experimentando lo que conocemos como distimia.

¿Qué es la distimia?

La distimia, o trastorno depresivo persistente, es una forma de depresión de larga duración. No es tan intensa como una depresión estándar, pero es más prolongada, ya que podría durar incluso años.

Puedes pensar que la vida te pesa más de lo normal, que vives en un estado constante de negatividad o nostalgia, sin saber exactamente por qué. En realidad, lo que estas experimentando es un trastorno del estado de ánimo y de autoestima que está afectando en gran medida en tu calidad de vida.  

Actualmente, la salud mental es una prioridad y cada vez está más cuidada y respaldada. No obstante, el 34,3% de la población padece algún trastorno mental o del comportamiento (hombres 31,1%; mujeres 37,4%) tal y como establece el Informe Anual del Sistema Nacional de Salud. Siendo los trastornos de ansiedad, los del sueño y los depresivos, los más destacados.

¿Cómo puedo saber si es distimia y no solo cansancio?

Es posible que lleves tiempo con ese estado de ánimo y pienses que ya es parte de tu vida, que es normal que te sientas así. Sin embargo, hay señales que te ayudarán a identificarla. Si durante años has sentido ese bajón la mayor parte del tiempo y, además, se combinan con estos síntomas que te vamos a contar, es hora de que le prestes un poco más de atención: 

Síntomas de la Distimia

Es verdad que estos síntomas puede que no sean tan intensos, pero están ahí, minándote poco a poco y afectando en tu vida más de lo que piensas. Quizás, es hora de echarle un poquito más de valor y enfrentarte a ello.

¿Por qué ocurre?

No existe una única razón que explique la distimia. Generalmente, es el resultado de una combinación de factores: 

  • Genéticos: parece ser que hay una fuerte tendencia hereditaria, es decir, si tus padres o familiares más cercanos han tenido distimia, es más probable que tú también lo desarrolles.
  • Biológicos: los desequilibrios en neurotranmisores, como la serotonina, un compuesto clave en la regulación del estado de ánimo, puede estar también involucrado.
  • Ambientales: factores como la contaminación, el ruido, la falta de sueño pueden ser también desencadenantes de esta situación. 
  • Psicológicos: las experiencias previas, la forma en que manejas las emociones y estrés, y las posibles dificultades en las relaciones con tu pareja, familia, amigos…. puede influir mucho en tu estado de ánimo.

El tener interiorizado esa sensación de vacío, no puede justificar que normalices la situación, es momento de coger fuerzas y buscar las herramientas necesarias para salir de esta situación.

¿Se puede tratar la distimia?

¡Claro que se puede! Es verdad que el proceso no será inmediato, pero lo más importante es escucharte durante el camino, ser paciente y no juzgarte ni presionarte. Cada persona lleva su propio ritmo y tiene sus procesos.

Busca ayuda de un profesional

La terapia cognitivo-conductual es una de las herramientas más efectivas que puede ayudarte a identificar, a comprender y aprender a cambiar esos pensamientos negativos que están afectando tanto en tu vida diaria. La ayuda de un profesional es crucial para superar esta situación.

Fomenta hábitos que te ayuden

En algunos casos, la alimentación antinflamatoria, hacer ejercicio regular y un buen sueño reparador pueden tener un impacto positivo en tu estado de ánimo.

Mantente cerca de tu gente

Aunque hay momentos en los que necesitas estar sol@, es fundamental que mantengas el contacto con tus amigos y familiares, ellos pueden darte ese chute de energía cuando lo necesites.

Tener rutinas diarias y flexibles

Esto te ayudará a tener un poco de orden en tu día a día.  Eso sí, dejar alguna cosa durante la semana para la improvisación, te ayudará a ser más flexible, manejar mejor los imprevistos y no caer en la trampa del perfeccionismo.

Practica técnicas de relajación

La meditación, el yoga o la respiración profunda pueden ser muy buenos aliados para que logres reducir el estrés, te enfoques en el día presente y mejores el nivel de serotonina, la hormona de la felicidad.

Conclusiones

No tienes que vivir así para siempre, todo tiene su fin, incluso lo malo. No te resignes a estar así, toma conciencia de la situación que estas viviendo, coge esa fuerza que tienes y busca el apoyo profesional adecuado.

Es verdad que el cambio no será de la noche a la mañana, pero si tienes un acompañamiento correcto, irás haciendo pequeños cambios que te harán volver a recuperar la alegría y el entusiasmo.  Da el primer paso para cambiar esta historia.

4 Tipos de Autoestima y su Relación con la Comida

¿Puede tu autoestima y los tipos de autoestima que tienes influir de manera positiva o negativa en tu relación con la comida?. Spoiler: Sí y lo hace a diario.

Cómo te ves y percibes, no sólo físicamente si no también mentalmente (como te hablas, como te juzgas y cuánto te valoras) afecta completamente a la relación con la comida que tienes.

Lamentablemente, nos han hecho creer que para ser más guapxs o vernos mejor tenemos que cambiar el aspecto físico y eso nos lleva indudablemente a priorizar dos cosas: comida y deporte.

como verme bien - autoestima

Imágenes sacadas de Pinterest bajo el término “Como verme bien”

Si hacemos una simple búsqueda en Pinterest sobre “Como verme bien”, lo único que recibimos son planes alimenticios, quemagrasas y rutinas de deporte. Es triste sí, pero es aún más triste ver esto sabiendo que la autoestima poco y nada tiene que ver con tu físico: es mayoritariamente un concepto mental.

A medida que avanzamos en este artículo, vamos a ver qué es exactamente la autoestima, los tipos de autoestima, qué tipo de autoestima puedes tener en base a ejemplos concretos y cómo se relaciona esto con la comida.

Además, te vamos a dejar un test y recursos para poder trabajarla.

¿Qué es la Autoestima?

La autoestima es la forma en la que te valoras y percibes a ti mismx y se basa en las opiniones y creencias que tenemos sobre cada uno de nosotrxs.

Como ves, en el significado de autoestima no encontramos nada relacionado con el aspecto físico. Todo lo contrario, juicios y valoraciones personales que son, por supuesto, mentales.

Emma Watson - frase sobre autoestima Tipos de autoestima

De hecho, grandes figuras públicas como actores, actrices y modelos han hablado sobre esto haciendo ver que por mucho que la mayoría de gente idealice sus cuerpos, todos tienen problemas de autoestima. Esto puede ser por juicios sobre sus cuerpos, problemas de validación personal, reconocimiento, autoexgencia, etc.

Tipos de Autoestima

Aunque casi siempre oímos hablar de la autoestima como un todo, tienes que saber que en verdad hay 4 tipos de autoestima. Así lo determinó el médico y psicoanalista Luis Hornstein:

  • Autoestima Alta y Estable
  • Autoestima Alta e Inestable
  • Autoestima Baja y Estable
  • Autoestima Baja e Inestable

1. Tipos de Autoestima: Alta y Estable

Este tipo de autoestima es el que se aspira a conseguir ya que es la más positiva y estable de todas. Esto no quita para que entiendas que todos tenemos días mejores y peores y por tanto, la autoestima fluctúa.

En rasgos generales, quienes tienen este tipo de autoestima tienen seguridad en sí mismxs, confían en sus propios valores y argumentos. También se respetan y escuchan y saben ver tanto sus fortalezas como sus debilidades.

Ej. Una persona con autoestima Alta y Estable es capaz de conversar con otras personas y exponer sus propias ideas sin miedo, pero también respeta y escucha otras opiniones.

2. Tipos de Autoestima: Alta e Inestable

Las personas que tienen este tipo de autoestima tienen generalmente una buena opinión de sí mismxs. Se valoran y aprecian al igual que las personas con autoestima alta y estable.

Sin embargo, la diferencia está en la parte de estabilidad que quiere decir que estas personas no son capaces de mantenerla estable a lo largo del tiempo. Por tanto, ante una situación que amenace su autoestima, van a reaccionar de forma atacante para protegerla.

Este tipo de autoestima también puede verse en personas altamente sensibles (PAS), ya que al vivir las emociones con mucha intensidad, suelen sentir más fuerte las críticas, el rechazo o la comparación. Todo eso hace que su autoestima se vea más afectada por lo que pasa fuera y les cueste mantenerla estable.

Ej. Una persona con autoestima Alta e Inestable es capaz de conversar con otras personas y exponer sus propias ideas sin miedo. Sin embargo, ante una respuesta de otra persona rebatiendo su opinión, puede no aceptar la otra opinión y defender su postura de todas las maneras.

3. Tipos de Autoestima: Baja y Estable

Al contrario que con las personas que tienen una alta autoestima, al tener la autoestima baja, estas personas no se valoran suficiente. Tienden a infravalorarse respecto a otras personas y a menudo actúan con miedo o inseguridad.

Este tipo de autoestima suele ser común en personas con distimia, un trastorno del estado de ánimo que provoca una sensación constante de negatividad hacia unx mismx. 

Al ser estable, las circunstancias externas no les afectan y por tanto, siempre tienen esa visión negativa o más pesimista sobre ellos mismos.

Ej. Las personas deprimidas suelen tener una autoestima baja y estable ya que no son capaces de valorarse en esos momentos.

4. Tipos de Autoestima: Baja e Inestable

Por último, las personas con autoestima baja e inestable también tienen un concepto personal bajo de sí mismxs, pero este cambia según las circunstancias externas que les rodeen. Es decir, la autoestima puede subir ante un reconocimiento externo, pero rápidamente vuelve a bajar.

Estas personas son más influenciables ya que tienden a seguir y agradar a otros para intentar tener ese chute de autoestima positiva, pero pronto vuelven a sentir que no son suficientes.

Ej. Una persona con baja autoestima e inestable puede estar en un grupo de amigos y seguir las opiniones ajenas para conseguir que los otros le valoren, pero a la larga sigue sin sentirse valorado ni tiene confianza en sí mismx.

Relación entre la Autoestima y la Comida 🥐

Cómo te ves y te valoras influye en la relación con la comida. Si eres una persona con autoestima baja, vas a pensar que tienes que cambiar algo en ti para poder quererte. Sin embargo, tú ya tienes todo lo que necesitas, sólo te falta verlo.

“Tu autoestima la determinas tú. No tienes que depender de que alguien te diga quién eres.”
Beyoncé

Cuando entras en ese bucle de querer cambiar van a venir pensamientos como estos:
• “Si pierdo peso, me veré mejor”
• “Si me visto con ropa cara, tendré más oportunidades”
• “Si me hago este retoque estético, estaré más guapx”

Esas creencias que vas instaurando en tu mente hacen que empieces a hacer cambios que lo único que hacen es poner en peligro tu salud física y mental. Las dietas, hacer ejercicio con el único propósito de cambiar tu aspecto físico, los ayunos sin control… Sólo ponen tu salud en riesgo.

De hecho, así es como se inician los TCA (trastornos alimenticios) como la Ortorexia, una obsesión por comer “saludable” o el Trastorno ARFID donde las personas rechazan alimentos por su sabor, textura u olor. Ese deseo de cambiar el físico lleva a la restricción de comida, la persona cree verse mejor porque ha perdido peso y sigue restringiendo hasta llegar a puntos de inanición, atracones…

Es importante que entiendas que la autoestima va por dentro, que por mucho que pierdas peso o cambies tu físico, esta no va a cambiar. Si no te valorabas antes, tampoco lo harás ahora.

Una vez aceptes esto, te será mucho más fácil trabajar tu autoestima y ponerte en manos de profesionales que puedan ayudarte. En nuestro equipo contamos con Sara, psicóloga especializada en autoestima y relación con la comida, que estará encantada de escucharte y ayudarte 💕

Test de Autoestima y cómo trabajarla

Ahora que sabes los tipos de autoestima que existen y cómo influyen en tu relación con la comida, querrás saber cómo está tu autoestima.

Por eso te dejamos este test, para que te ayude a entenderte un poquito más y a saber qué pasos necesitas dar para mejorarla:

Test de Autoestima

GRATIS

¿Alguna vez te has planteado cuánto te valoras o cómo te hablas? 💖 

Con este test de autoestima tendrás la oportunidad de conocerte un poquito más, evaluar tus emociones y analizar qué puedes necesitar. 

Además, después de hacer el test, te recomendamos leer los consejos de unx psicólogx especialista en TCA. A veces, ese primer paso de informarte puede marcar la diferencia para empezar a sentirte mejor.

Conclusión

La autoestima es un concepto de valoración personal y por tanto, subjetivo y muy mental. Cambiar físicamente no hace que la autoestima mejore, de hecho, muchas veces puede poner en peligro tu relación con la comida.

Dependiendo de los tipos de autoestima que existen y en qué grupo consideras estar, puedes trabajar diferentes aspectos de ella para mejorar en lo que necesites.

Y recuerda ponerte siempre en manos de profesionales especializados 💕

Cómo Ayudar a una Persona con Ansiedad

¿Llevas tiempo agobiadx porque alguien de tu entorno tiene ansiedad y no sabes cómo ayudar? 😕 Ver a una persona que quieres pasarlo mal y no saber qué hacer es una situación difícil, por eso hemos creado esta guía que queremos que te ayude a responder a la pregunta: Cómo ayudar a una persona con ansiedad.

La ansiedad en cifras y datos

La OMS determina que el 4% de la población mundial sufre ansiedad y el Gobierno de España determina que el problema de salud mental más frecuentemente registrado en las historias clínicas de atención primaria es el trastorno de ansiedad que afecta al 6,7% de población con tarjeta sanitaria.

Son datos alarmantes ya que las cifras no paran de crecer y aun así, coger cita para que te vea un psicólogo de la Seguridad Social puede ser eterno.

prevalencia de los trastornos de la ansiedad

Prevalencia del trastorno de ansiedad por edad y sexo. Fuente: Ministerio de Sanidad

Además de esto, la ansiedad parece haberse normalizado en la sociedad ya que es algo tan común que nos parece hasta normal. De hecho, seguro que incluso tú mismx puedes haber tenido periodos largos y prolongados de miedo y preocupación excesiva. No es algo raro, pero sí es difícil saber cómo afrontarlo.

Pero, ¿qué es exactamente la ansiedad?

La ansiedad se define como una respuesta automática del cuerpo a situaciones que te generan miedo o preocupación o que pueden ser peligrosas. Por tanto, la ansiedad es una emoción muy útil que te permite estar alerta y salvarte de algún peligro en ocasiones en las que sea necesario.

Y claramente te preguntarás, ¿entonces por qué es algo negativo?. Aquí tenemos que diferenciar entre ansiedad y el trastorno de ansiedad, que son cosas diferentes aunque relacionadas.

En el Trastorno de ansiedad, se sientes las mismas sensaciones y emociones que cuando tienes ansiedad, solo que en vez de hacerlo en situaciones que pueden ser peligrosas, ocurren en situaciones del día a día. Esto repetido en el tiempo, puede llevar al miedo y estrés continuo impidiéndote seguir tu rutina diaria con normalidad.

Este trastorno puede hacerse presente con síntomas físicos como palpitaciones, sudoración y temblores y/o síntomas mentales como preocupaciones constantes y miedos irracionales.

Por último, esta ansiedad también puede darse en otras situaciones y circunstancias como en el caso de la ansiedad por comer. Te dejamos este artículo sobre ansiedad por la comida por si quieres profundizar en ello.

Guía para saber cómo ayudar a una persona con ansiedad

En muchas ocasiones, cuando tenemos a un familiar o amigo con ansiedad no sabemos exactamente cómo actuar. Es una situación preocupante porque sientes que no puedes ayudar a esa persona, que te gustaría liberarle de todo eso, pero no puedes porque te faltan herramientas para hacerlo.

Por eso, aquí te dejamos unos tips para que puedas echarle una mano y saber por fin cómo ayudar a una persona con ansiedad.

1. Comprende la ansiedad 🔎

Antes de intentar ayudar, es fundamental que entiendas qué es lo que le está pasando, que es lo que le está llevando a esa persona a tener ansiedad y por qué. A veces la ansiedad puede venir derivada de experiencias pasadas o incluso traumas, así que es importante entender a la persona ya que así podrás ayudarlx de verdad.

Puedes empezar preguntándole por cómo se siente y qué cree que le ha llevado a este punto. También te puede servir decir: “quiero intentar entenderte para poder ayudarte”. De esta manera la persona no se siente juzgada y sabe que lo único que quieres es intentar ayudar.

2. Sé un espacio seguro 💝

En base a lo que comentábamos previamente, las personas con ansiedad a menudo se sienten juzgadas o incomprendidas. Procura ser un espacio seguro para esa persona, un espacio donde sienta que puede expresarse sin miedo a sentirse juzgadx.

Escuchar es el primer paso así como hacer preguntas si esa persona está dispuesta a hablar sobre ello y quiero contarlo y, sobre todo, evita minimizar sus sentimientos. Por tanto, los comentarios como: “no es para tanto” o “no pasa nada” se sustituyen por algo como “entiendo que esto te preocupe”, “¿cómo puedo ayudarte?” o “¿cómo puedo hacerte sentir mejor?”.

3. Empatía antes de nada 🤗

Intenta entender a la persona y ponerte en sus zapatos (esto es más fácil si entiendes bien el por qué de esta ansiedad). Sentirse comprendidx hará que quiera compartir contigo cómo se siente realmente.

Es importante no intentar “arreglar” la situación, solo intenta estar cerca y acompañar. Ponerse al corriente sobre la ansiedad puede desmitificarla y reducir el miedo a lo desconocido.

Por ejemplo, leer sobre el tema juntxs puede ser otra forma de apoyo. Libros, artículos o vídeos pueden ayudar a responder preguntas y desbloquear situaciones que le ayuden a mejorar.

4. Sé paciente 🙄

La ansiedad no va a desaparecer de la noche a la mañana. Es un proceso continuo que requiere paciencia y constancia y por tanto, habrá días mejores y días peores.

Es importante que tu apoyo no flaquee, ni juzgue. No quieras hacerle cambiar determinados sentimientos porque a ti te parezcan lógicos, cada uno siente de una manera determinada y tiene sus tiempos para asentarlos. 

5. ¿Cómo ayudar a una persona con ansiedad? Hazle saber que estás ahí 👨🏾‍🤝‍👨🏽

Dejarle claro que puede contar contigo cuando lo necesite es clave. Esto le dará mayor sensación de seguridad, tranquilidad y confianza. Tener a alguien que quieres cerca cuando estás pasando una mala etapa, es bastante reconfortante.

6. Recomienda que busque ayuda profesional 👩‍⚕️

Aunque tu apoyo es importante, el tratamiento con un profesional especializado en la materia es crucial. La ansiedad hay que tratarla y trabajarla para poder mejorar sobre las situaciones que la producen.

Anímale a buscara a alguien especializado o incluso, puedes ayudarle en esta búsqueda para que le dé las herramientas necesarias para ir dando pasos hacia la recuperación.

Reserva una sesión de dudas gratis ❣️

Sabemos que muchas experiencias con nutricionistas o psicólogas no son como te esperas. Por eso queremos que tengas este espacio gratuito donde podamos conocernos y ayudarte a resolver las dudas que tengas sin ningún compromiso.

7. Anima a tener buenos hábitos 🍲

Puedes ayudarle a mantener hábitos que le hagan sentir bien (siempre escuchando a la persona y viendo lo que necesita) como por ejemplo:

  • Ejercicio: no hace falta que haga deporte intenso si está en un momento muy bajito, pero algo tan simple como salir a caminar puede ayudarle a reducir los síntomas de ansiedad.
  • Alimentación equilibrada: tener unos horarios de comida regulares y una buena relación con la comida pueden quitar muchas preocupaciones a la persona que está viviendo esa ansiedad.
  • Descanso adecuado: dormir las horas suficientes en un ambiente propicio es esencial para que pueda descansar lo suficiente.

8. No te olvides de ti 💯

Es importante recordar que aunque quieras ayudar, también necesitas cuidar de ti mismx. Si tú no estás bien, no podrás ayudar a nadie. Así que establece tus límites y cuídate para no agotarte emocionalmente.

9. Practicad técnicas de relajación juntxs 🕉

Existen muchas técnicas de relajación que pueden ayudar a reducir la ansiedad. Practicarlas juntxs puede darle ánimos para seguir adelante y sentirse acompañadx en momentos de ansiedad.

  • Respiración profunda: tomar respiraciones lentas y profundas puede calmar el sistema nervioso.
  • Meditación y mindfulness: la meditación guiada y el mindfulness pueden ayudar a centrar la atención y reducir las crisis de ansiedad.
  • Yoga: el yoga combina ejercicio físico y relajación, un mix muy positivo que puede ayudar a que tu familiar o amigx esté activx y al mismo tiempo, cuide de sí mismx.

10. Propón planes en compañía 🍿

Esto puede ser difícil sobre todo cuando la persona está sufriendo momentos de ansiedad constante o está muy bajitx de ánimos. La clave es intentar no presionar en hacer muchos planes o incluso planes fuera de casa, ya que a lo mejor no le apetece nada.

Prueba a comentar diferentes planes por si alguno le apetece y si no quiere hacer planes fuera, también podéis probar por un plan sencillo como estar en casa y ver una peli.

Ese tiempo juntxs puede aportar mucho a su mejoría y, además, es un buen momento para hablar y que te cuente cómo se siente ya que el ambiente es más relajado y distendido.  

11. No des consejos si no te los pide 🤫

Aunque sabemos que lo haces por ayudar, en ocasiones dar un consejo cuando no te lo piden puede ser contraproducente. Lo ideal es que la persona esté acompañada por profesionales especializados que saben cómo ayudarla, así que sólo tienes que escuchar qué le han propuesto ellos y acompañarle en ese proceso.

Y recuerda: generalmente no necesita que le digas qué tiene que hacer o cómo actuar, con tu escucha, tu presencia y apoyo es más que suficiente.

Conclusión: ¿cómo ayudar a una persona con ansiedad?

El hecho de que quieras ayudar a una persona con ansiedad dice mucho de ti. Enfrentarte a esta situación es un acto de amor y comprensión.

Seguramente llevabas tiempo preguntándote: ¿cómo ayudar a una persona con ansiedad? y esperamos que leer esto te haya podido dar algunas ideas clave.

Ten en cuenta que el proceso requiere de paciencia y empatía para que esa persona se vaya encontrando mejor. Pero también recuerda que se necesita de un profesional en la materia para poder avanzar en esa situación. Tú no tienes todas las herramientas para que se recupere plenamente.

Además no olvides que tú eres un apoyo clave, pero no el único. También tienes que cuidarte, si tú no estás bien será complicado que le ayudes en ese momento. Recuerda, cuídate para poder cuidar 💖

Cómo Gestionar las Emociones Negativas en los TCA

Quizás llevas unos días un poco bajitx de ánimos, estas apáticx, irascible y sin ganas de hacer nada. Sabemos que gestionar las emociones negativas algunas veces es complicado, especialmente cuando no tienes una guía o herramientas que te ayuden a enfrentarte a ellas.

Cógete una taza de café o té y siéntate un ratito mientras hablamos sobre esto. Es el momento de empezar a gestionar esas emociones que te están minando la autoestima.

Entendiendo las emociones negativas

Primero, y antes de empezar a saber gestionarlas, vamos a entender qué son las emociones negativas y por qué se experimentan. Las emociones como la tristeza, la ira, la ansiedad y la culpa son respuestas naturales a situaciones que percibimos como estresantes o amenazantes.

Es importante reconocer que todas las emociones, incluso las negativas, tienen un propósito (algo que nos ha enseñado perfectamente la nueva peli de “Inside Out 2” o “Intensamente 2”. Estas emociones nos informan sobre alguna necesidad a la que no estamos prestando atención o nos activan ante una situación peligrosa.

por qué surgen las emociones negativas

Sabemos que el primer pensamiento es querer eliminar estar emociones, pero después de lo que te acabamos de contar, son demasiado útiles y necesarias como para simplemente intentar borrarlas. En lugar de eso, pongamos el foco en aceptarlas y aprender a gestionarlas.

Aunque suene utópico, recuerda que toda experiencia tanto buena como mala, te aporta valor. Aquí te damos varios consejos para afrontar esta situación de la mejor forma posible.

Estrategias sobre cómo gestionar las emociones negativas

No bloquees las emociones, busca de dónde pueden venir

Cuando intentas evitar algo o dejar de pensar en algo, inevitablemente no paras de pensar en ello. Así que trata esa emoción como una amiga que viene a contarte un problema. Entiende de donde viene, intenta que no te domine y esto te ayudará a afrontarlo y solucionarlo mejor. No seas durx contigo mismx, si esas emociones aparecen,  es mejor saber por qué que poner un parche y que luego vuelvan a surgir.

Practica meditación y mindfulness

Desconecta un poco de ese barullo que tienes en la cabeza, te garantizamos que no va a pasar nada porque te dediques 10 minutos. De hecho, sí va a pasar algo: que te va a ayudar a reducir la ansiedad y vas a poder responder ante cualquier situación de manera mucho más efectiva.

Puedes empezar con meditaciones guiadas de 5-10min ya que te resultará más sencillo y observa tus pensamientos y sentimientos durante ellas, siempre sin juzgarte.

Busca ayuda de un profesional

Hacer terapia con un especialista puede ayudarte a cambiar los patrones de pensamientos negativos que te están haciendo sentir así. Te enseñarán a identificar esas creencias y emociones y a tener una visión más realista de la situación.

Sabemos que vivimos en una sociedad en la que si necesitas información, la tienes siempre a tu disposición, pero muchas veces esas emociones y sentimientos son complejos que no es fácil dar con el por qué. Si te sientes así, buscar una terapia acorde a lo que necesitas, puede ayudarte a estar mucho mejor.

Escribe un diario de emociones

Escribe cómo te sientes, las emociones diarias y las situaciones que te han llevado a sentirte así, junto con tu respuesta ante ellas. Con el tiempo, esto te permitirá entender mejor como reaccionas y las situaciones que tienes que trabajar más para afrontarlas de otra manera. Así, irás gestionando mejor las emociones negativas.

Aquí te dejamos un artículo sobre cómo hacer tu diario de emociones.

Tu gente será un gran apoyo

Habla sobre tus emociones con amigxs, familiares o personas que te hagan sentir mejor… ¿sabes cuando llevas un rato hablando con alguien y de repente paras y sueltas aire? Te sientes mucho más libre, más ligerx. Enfrentarte a esas situaciones acompañadx puede reducir la carga emocional y ofrecerte una nueva perspectiva.

estrategias para gestionar las emociones negativas

La Relación entre Emociones y TCA

En el contexto de un trastorno de conducta alimentaria (TCA), estas emociones a menudo se amplifican debido a la relación compleja con la comida, el cuerpo y la autoestima.

Los TCA como la anorexia, la bulimia y el trastorno por atracón, no surgen exclusivamente en torno a la comida y el peso corporal. A menudo, son mecanismos de afrontamiento para manejar emociones difíciles que no sabemos resolver.

Es común que las personas con TCA utilicen la comida como una forma de controlar sus sentimientos o para sentirse mejor en un momento concreto. Sin embargo, esta forma de gestión de las emociones negativas, puede llevarte a conductas que pueden hacerte mucho daño.

Las emociones negativas como la tristeza, la ansiedad, la vergüenza y la culpa, juegan un papel significativo en el desarrollo de estos trastornos.

  • Tristeza: la baja autoestima, la percepción distorsionada del cuerpo y la insatisfacción constante pueden llevar a una tristeza continua. Esta tristeza puede desencadenar un desequilibrio en la alimentación como forma de autocastigo o como un intento de buscar control y alivio.
  • Ansiedad: la preocupación constante por el peso, la comida y la apariencia física puede generar una ansiedad constante. Además, esta ansiedad puede aumentar si tienes mucha presión en el trabajo o en el instituto, generando patrones de alimentación restrictiva o episodios de atracones y purgas más constantes.
  • Culpa: las personas con estos trastornos pueden sentir vergüenza por su apariencia física o por cómo se comportan con la comida. Esto, unido a la culpa que puede surgir con la ingesta de ciertos alimentos, se convierte en un combo autodestructivo que solo te está perjudicando tanto física como mentalmente.

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Si tienes dudas sobre tu relación con la comida o crees que podrías tener un TCA, puedes hacer este test y obtener información sobre cómo te sientes y las conductas que tienes entorno a la comida ❤️‍🩹

Después del test, te guiaremos sobre las opciones más recomendadas en cada caso.

Cómo gestionar las emociones negativas en los TCA

Lo primero que hay que entender es que el vínculo entre las emociones negativas y los TCA es bidireccional. No solo las emociones negativas pueden desencadenar y mantener los TCA, sino que los propios TCA también pueden intensificar estas emociones.

  • Emociones como desencadenantes: en muchas ocasiones se recurre a la comida como una forma de manejar o escapar de las emociones negativas ya que no sabemos lidiar con ellas de otra manera.
  • Consecuencias emocionales de los TCA: los TCA en sí mismos pueden generar una espiral de emociones negativas. Este tipo de descontrol en las comidas puede generar sentimientos de fracaso, vergüenza y culpa. Esa obsesión constante por el peso, hace que tu vida gire en torno a ello, perjudicando tu autoestima y satisfacción personal.

Si te sientes reflejadx en alguna de estas situaciones, es el momento de pedir de ayuda. No eres débil, no eres rarx… los TCA son enfermedades mentales que se pueden tratar y hay profesionales que te pueden ayudar en este proceso. En Obylagom te recomendamos un enfoque integrativo, ya que el trabajo conjunto de psicólogxs y nutricionistas hará que el tratamiento sea más efectivo.

Nutricionistas y psicólogos especializados en TCA

De todas maneras, si tienes dudas de cómo puede ayudarte un nutricionista en estos trastornos, puedes consultar nuestro artículo sobre Cómo curar los TCA ya que responderá muchas de tus preguntas.

Conclusión

Gestionar las emociones negativas siempre es un desafío, pero no te preocupes, porque vas a volver a encontrar ese equilibrio y a mejorar tu estado de ánimo. La clave es buscar ayuda en buenos profesionales que te darán las herramientas necesarias para poder entender tu situación y empezar a mejorar poco a poco.

Sabemos que es fácil de decir y complicado de hacer, pero intenta ser paciente. Todo trabajo necesita su tiempo. Eso sí, mientras estés en el proceso, sé amable contigo mismx, cuídate mucho y reconoce y celebra cada pasito que des. Tienes que estar muy orgullosx de ti 💖

¿Empezamos?

¿Soy una Persona Altamente Sensible?

Quizás esta frase te suena de algo: “madre mía, qué sensible que eres, si no es para tanto”, una frase que puede hacerte creer que ser altamente sensible es algo negativo cuando entre un 15 y un 20% de la población lo sufre como rasgo de su personalidad. Así que, quizás te estés preguntando: ¿soy una persona altamente sensible? Por eso, vamos a intentar arrojar un poco de luz sobre cómo te sientes y qué significan tus emociones.

¿Qué es PAS o Persona Altamente Sensible?

Fue a partir de la década de los 90, cuando Elaine Aron introdujo este término dentro de los estudios psicológicos sobre personas con una sensibilidad alta ante determinados estímulos.

Las investigaciones sugieren que puede tener una base genética y estar relacionada con diferencias en el sistema nervioso central. Además, los estudios de neuroimagen han mostrado que las personas con alta sensibilidad (PAS) tienen una mayor activación en áreas del cerebro relacionadas con el procesamiento emocional y sensorial.

Sea como sea, estate tranquilx, ten en cuenta que no es ningún trastorno, ni tampoco ninguna enfermedad que necesite cura. La Sensibilidad de Procesamiento Sensorial (SPS) concepto científico que coloquialmente denominamos como “Personas Altamente Sensibles”, es un rasgo de la personalidad.

¿Cómo puedo saber si soy una persona altamente sensible?

Se ha identificado que las personas PAS, procesan los estímulos de una manera más profunda y tienen una sensibilidad mayor ante las emociones. En otras palabras, las experiencias cotidianas, tanto positivas como negativas, pueden afectarte más intensamente.

Elaine Aron estableció 4 factores que determinan este rasgo (DOAS). Así que, se podría decir: soy una persona altamente sensible si…

🌷 Procesas la información con mayor profundidad (Depth of processing)

Una de las características más destacadas de las personas altamente sensibles es que reflexionan de manera más intensa sobre sus experiencias. Es cierto que analizar estos estímulos puede llevarte más tiempo, pero pensar antes de actuar también tiene muchas cosas positivas. La comprensión y la creatividad se incrementan ya que tienen en cuenta más perspectivas y detalles. ¡Aprovéchalo!

🌷 Me sobreestimulo con facilidad (Overstimulation)

Esto ocurre cuando el cerebro recibe más información de la que puede procesar. Las personas con alta sensibilidad o PAS pueden sentirse agobiadas ante estímulos intensos y prolongados, como situaciones con mucho ruido o con mucha gente.

Normalmente, si te expones a una situación como esta, sueles necesitar un tiempo y espacios tranquilos para empezar a sentirte mejor. 

Si te pasa esto, aprende a reconocer tus límites y tomarte el tiempo necesario para recargar energías cuando lo necesites. Crea rutinas que te ayuden a reducir ese estrés y te sentirás mejor.

🌷 Soy muy emocional y empáticx (Emotional reactivity/empathy)

Así es, las personas altamente sensibles sienten de una manera más fuerte y no solo en situaciones duras o muy emocionales, si no en eventos del día a día.

Esto puede llevarte a ser más empáticx y por tanto, a ser capaz de sentir y entender las emociones de los demás con mayor facilidad. Si te sientes identificadx, no te olvides de ti.

Está muy bien ser amigx de tus amigxs y estar ahí cuando lo necesiten. Sin embargo, también es importante asimilar con calma todas estas experiencias ajenas, ya que pueden generarte bastante estrés y, en ocasiones, ser muy agotador para ti.

🌷 Soy más sensible ante las pequeñas cosas (Sensing the subtle)

Eres una persona extremadamente observadora y notas detalles muy sutiles que normalmente pasan desapercibidos. Y no sólo hablamos del entorno, si no que también, tienes mayor sensibilidad antes los estímulos sensoriales: vista, tacto, oído, olfato y gusto.

Es verdad, que esta agudeza puede ser muy positiva y una ventaja en determinadas situaciones, pero también pueden generarte una sobrecarga mental que algunas veces es complicada de manejar.  

Soy una persona altamente sensible si tienes estos 4 factores

Creo que soy una persona altamente sensible ¿Y ahora qué?

Ahora es el momento de darte mimos, de entenderte y de darte tus espacios para re-conectar. Ser una persona PAS no es algo que deba preocuparte a nivel de salud porque como hemos comentado, es un rasgo de la personalidad; pero sí que entenderte y comprender qué puedes hacer para sentirte mejor en determinadas situaciones, puede ayudarte un poco más.

Infórmate todo lo que puedas sobre este rasgo.

Solo entendiendo lo que te ocurre, podrás afrontarlo mejor. Actualmente en España hay una Asociación PAS que seguro puede ayudarte a responder muchas dudas y a sentirte más acompañadx en una comunidad de personas que pasan por lo mismo. Además, también sería recomendable que hicieras el test de Elaine Aron ya que te planteará preguntas que quizás no te habías formulado antes.

Pide ayuda si lo ves necesario.

Sabemos que algunas veces, enfrentarte a determinadas situaciones puede dar un poco de respeto, pero cuando antes puedas dar respuesta a cosas que no entiendes, mucho mejor. Solo un psicólogx especializado podrá guiarte y enseñarte a comprender los rasgos que puedan responder tu pregunta de ¿soy realmente una persona altamente sensible? Encontrarás la respuesta, ya verás.

Estrategias para personas PAS.

Dicho esto, es momento de poner en práctica algunos consejillos para enfrentarte a determinados desafíos que puede encontrar en tu día a día. Aquí van algunos de ellos:

  • Autocuidado: trátate con amabilidad y respeta tus tiempos. Quizás necesites más tiempo o más espacio para recuperarte de situaciones con sobrecarga sensorial o emocional pero no pasa nada. Aléjate del perfeccionismo y la autoexigencia. Es probable que tu naturaleza reflexiva te lleve a evitar errores, pero la autoexigencia no es nunca la solución. Dedícate un ratito a ti, agárralo muy fuerte y abrázalo, no hay mejor manera de emplear tu tiempo que en ti mismx.
  • Entornos calmados: la alta sensibilidad a los estímulos puede llevarte a niveles elevados de estrés, ansiedad y sobrecarga emocional. Para contrarrestar eso, crear espacios tranquilos y libres de estímulos excesivos puede ayudarte a reducirlos. Tener espacios ordenados, con una luz suave y minimizando los ruidos, puede ser una ayuda muy útil para que te sientas mejor.
  • Mindfulness y meditación: centrarte en el momento e instante preciso, es una de las claves para reducir la posible fatiga y la saturación. Darte ese espacio de manera frecuente te ayudará a conocer mejor y a relajarte cuando lo necesites. Escúchate y para cuando te lo pida el cuerpo.
  • Comunicación asertiva: a veces las personas que nos rodean no saben cómo nos sentimos realmente. Por eso es importante, ser clarx y transparente. Es la manera de poner límites ante circunstancias o conflictos que te cuesta manejar. No pierdas el foco, tú tienes el mismo valor que los demás y tus necesidades son también muy importantes. No tengas miedo de pedir apoyo a tu gente, ellos te quieren tal como eres y, siendo directos, podrán entenderte mejor.
¿Soy una persona altamente sensible? aquí tienes unas estrategias para los desafios del día a día

Conclusiones

Las personas altamente sensibles o PAS tienen una cualidad especial que les permite vivir el mundo de una forma profunda y emocional. Sin embargo, esta alta sensibilidad también puede presentar desafíos que a veces resultan difíciles de manejar.

Es importante entender lo que te sucede, cómo te sientes y cómo enfrentar ciertas situaciones para que puedas vivir de manera más tranquila con tu sensibilidad única.

Esperamos que tu pregunta sobre ¿soy una persona altamente sensible?, se haya aclarado con esta información. Recuerda, la sensibilidad no es una debilidad, es una fortaleza. Así que, ¡acéptala y valórala! ¡Tú eres unicx!