¿Qué Hacer Después de un Atracón?

Sabemos que después de tener un atracón, lo único en lo que piensas es en que no quieres volver a tener otro jamás. Sin embargo, a menudo te encontrarás volviendo a tenerlos porque una parte de ti NECESITA ese atracón.

En este artículo te vamos a contar por qué vienen los atracones, cómo diferenciar un atracón de otras situaciones en las que se puede comer más de lo que necesitas y qué hacer después de un atracón en el caso de que lo hayas identificado como tal.

¿Qué es un atracón?

Un atracón es una conducta que puede generar bastante frustración y malestar. Se trata de comer grandes cantidades de comida, en un corto periodo de tiempo y sin hambre real aparente.

Este comportamiento puede ser una respuesta emocional al estrés, la ansiedad, la tristeza, o incluso al aburrimiento y generalmente, se hace desconectado de la situación que te rodea. Es importante reconocerlo y analizarlo para poder entender cómo tratarlo.

Es decir, todxs en algún momento hemos comido más de lo que necesitábamos y nos hemos quedado muy llenxs después; sin embargo, el atracón va más allá de una comida copiosa y si ocurre con frecuencia, es cuando debería sonar la señal de alarma ya que esta situación puede desembocar en un trastorno por atracón.

Trastorno por Atracón vs Comidas Copiosas

Para resumir este punto tan importante, podríamos decir que las características más relevantes del Trastorno por Atracón son:

Posibles desencadenantes

Este trastorno puede desarrollarse por varios factores, que por desgracia, son cada vez más comunes en nuestro día a día.

Los atracones siempre vienen por una o dos vías que actúan juntas: Restricción física y Restricción Mental.

• 🥐 Restricción física: generalmente ocurre después de un periodo largo de dietas o de comer muy poca cantidad de comida. Después de un tiempo, tu cuerpo entra en estado de alerta porque le falta energía constantemente (ya que estás comiendo muy poco). Esto hace que envíe señales a tu cuerpo “diciéndole” que la próxima vez que tenga comida disponible, tiene que comer de más. Es decir, te pone en modo “depredador” porque tiene hambre y tu cuerpo está intentando salvarte.

• 🧠 Restricción mental: ya sea por esas dietas realizadas o porque al tener algún atracón, empiezas a tener miedo a ciertos alimentos. Esto hace que con el paso del tiempo, generes ciertos tipos de restricciones mentales en torno a la comida y los alimentos. Por eso, dejas de permitirte alimentos que te gustan, tienes culpa después de las comidas, etc. Esta culpabilidad hace que se acentúen las emociones negativas que te genera el atracón y por tanto, que seguramente vuelvas a la restricción física empezando el bucle de nuevo.

Además de todo esto, la sociedad en la que vivimos no ayuda. Las presiones en torno al cuerpo, las preocupaciones excesivas sobre el peso y las restricciones alimentarias que tanto se promueven en redes sociales, hacen que esa culpabilidad y obsesión por el aspecto físico se acentúe aún más.

Si te sientes así, te recomendamos revisar esta guía sobre los tratamientos de TCA para saber cómo enfocar el proceso de recuperación.

¿Qué hacer después de un atracón?

Después de este momento, sabemos que lo que más vas a querer hacer es encontrarte mejor y quitar la incomodidad física y mental lo antes posible, pero de cara a prevenir nuevos atracones, es esencial que se gestione de forma adecuada:

Acepta y analiza lo ocurrido

Esto es una de las cosas más importantes. Analizar por qué ha podido venir el atracón es esencial para poder trabajarlo después en consulta (si había una restricción física o emocional previa).

Reflexiona sobre lo que te ha hecho tener el atracón. Tener un diario de emociones y pensamientos puede ayudarte a identificar patrones que podrás ir trabajando con un psicologx y/o nutricionista especializadx en TCA.

Además, saber por qué ha venido te ayuda a reducir la culpabilidad y a evitar que te juzgues y culpabilices en exceso. Ser tu mejor amigx y respetarte, es clave para tu recuperación. La autocritica excesiva sólo empeorará la situación.

Evita las compensaciones y restricciones

Es posible que en algún momento, tu reacción haya sido intentar compensar después de tener un atracón de comida ya sea haciendo ayuno, vomitando o haciendo ejercicio en exceso. Este tipo de compensaciones, solo harán que te metas de nuevo en el ciclo de atracones como hemos hablado más arriba.

Lo mejor que puedes hacer es comer cuando vuelvas a tener hambre y priorizar comer suficiente. A pesar de lo que puedas pensar, pasar hambre después de un atracón hace que sea mucho más probable que tengas otro (recuerda que el atracón es la forma que tiene tu cuerpo de decirte que está faltando comida en otros momentos). Esta parte es esencial trabajarla con los profesionales adecuados (punto del que hablaremos más adelante)

Como motivación adicional, te dejamos este vídeo de nuestra fundadora Olga donde cuenta cómo superó los atracones:

 Hidrátate

Después de un atracón seguramente necesitas beber más agua ya que durante estos, se tienen a comer alimentos más procesados y con alto contenido en sal. Mantenerte hidratadx te ayudará a sentirte mejor.

Busca ayuda profesional

Como comentábamos, ir de la mano de profesionales especializados en TCA es esencial para poder salir de ahí lo antes posible. Además, tal y como planteamos en Obylagom, es imprescindible que el enfoque sea integrativo y se aborde tanto la parte física como mental. Nuestras profesionales trabajarán de manera conjunta contigo para sanar la relación con la comida al 100%.

• Psicólogx: te ayudará a identificar y modificar las creencias negativas sobre la alimentación y el cuerpo que tanta carga mental te están generando. Trabajar la autoestima es fundamental para que vuelvas a estar bien.
• Nutricionista: evaluará tu situación nutricional y te ayudará a sanar la relación con la comida mientras se trabaja sobre los atracones para que se vayan disminuyendo poco a poco. Además, conseguirás volver a escuchar a tu cuerpo y recuperar la sensación de hambre y saciedad.

Puedes reservar tu sesión con nosotras aquí:

Es importante que te sientas cómodx con los profesionales que te están tratando. Tiene que ser un espacio en el que puedas compartir cómo te sientes sin estar cohibidx y esperamos que con nosotras encuentres ese ratito y lugar 💖

Cuídate

Y cuando te decimos cuidarte, te decimos que te escuches, que si te apetece hacer algo lo hagas y que si no te apetece, no lo hagas, no pasa nada. No hay reglas marcadas, simplemente escúchate y analiza qué es lo que puede hacerte sentir mejor en ese momento (quizás es una ducha caliente, cambiarte y salir a tomar el sol un ratito, algo pequeño que te haga sentir bien).

Busca apoyo en tu entorno

Tu familia y amigos pueden ser un gran sustento en la recuperación. No hace falta que les cuentes lo que ha pasado si no te sientes con fuerza, pero apóyate en ellos para que te animen a salir de casa o simplemente a hacerte compañía si crees que te puede hacer bien.

Marca algunas rutinas

Eso te puede ayudar a reducir la ansiedad y a estabilizarte. Establece horarios regulares para las comidas y para el descanso ya que así podrás saber lo que tu cuerpo necesita en cada momento.

Establece metas realistas

Establecer metas pequeñas y alcanzables puede ayudarte a sentirte más motivadx. La recuperación de un TCA lleva su tiempo y puede que en ocasiones haya altibajos; por eso, apuntar las situaciones en las que notas mejoría o cosas que has hecho para ir recuperándote, pueden motivarte en los momentos en los que sientas que no estás avanzando.

Conclusión

La recuperación de un TCA puede es un camino díficil, que en muchas ocasiones puede hacer que pierdas la energía y la paciencia. No te olvides, eres valiente, te estás enfrentando a ello y estás buscando la solución.

Recuerda, que la clave está en aceptar lo que te está ocurriendo sin ser durx contigo, evitando compensaciones y restricciones. Y sobre todo, busca buenos profesionales especializados en TCA para que puedas entender mejor qué te está pasando y te den las herramientas suficientes para recuperarte.

Por último, te dejamos la página de la Federación Española de Asociaciones de Ayuda y Lucha contra la Anorexia y la Bulimia nerviosa por si necesitas apoyo adicional.